Adopción de Botín

Botín llegó al albergue cuando era una pelusita de 1 mes aproximadamente. Tenía el rabo necrosado pero no sabemos porqué. Quizás se lo pilló en algún sitio o un perro lo atacó. La cuestión es que hubo que amputárselo porque era irrecuperable. Se ha recuperado de maravilla y es un gato muy feliz.
Todo este tiempo ha estado en el albergue. Ha crecido en la oficina de la protectora, junto a las personas que la llevan, así que está muy acostumbrado al trasiego de personas, gatos y perros. No se asusta de nada y es extremadamente sociable con todos. Ideal para una familia con niños o más animales en casa. Él se adapta a todo. Le pusieron ese nombre porque tiene unos botines blancos en las patitas de delante que le dan un toque muy gracioso.
Necesita un hogar con urgencia para que pueda terminar de crecer tranquilo y con las comodidades de una casa. Ven a conocerlo!!!